Durante gran parte del Siglo XIX, no ha habido un mayor símbolo del progreso, que el ferrocarril y su llegada al sur de Chile, significo un cambio de paradigma económico, la Región de los Lagos y sobretodo Osorno nunca volvieron a ser lo mismo.
Su llegada adquirió gran importancia hacia finales del Siglo XIX y comienzos del XX, sobretodo para el desarrollo de las ciudades de Valdivia, Osorno y Puerto Montt. La llegada a Osorno (1903) derivo al desarrollo de una potente industria agrícola y ganadera, el nuevo medio de transporte requirió una infraestructura especial en la ciudad, en la entrada norte requirió la construcción de un puente ferroviario curvo, él único en su tipo en todo el país, el tendido ferroviario a través de la calle Portales, que propició un acceso directo a las bodegas de las sociedades molineras, la necesidad de contar con estaciones ferroviarias modernas tanto para la carga de bienes, como de pasajeros. A medida que el ferrocarril desplace al vapor, como principal medio de transporte, se construyen nuevas poblaciones como la Felizardo Asenjo en Ovejería, para otorgar casas y servicios para los trabajadores de la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE por sus siglas); aunque con el paso del siglo, se moderniza el tendido ferroviario, desplazándose a su actual posición, por los constantes accidentes que ocurren en Portales, como el surgimiento del Automóvil y Buses. No solo cambia Osorno, surgen nuevas ciudades entorno a las vías, como Purranque que surge en 1911, con el paso del tren.
A pesar de que el Ferrocarril desapareció como medio de transporte en el Sur de Chile y cada cierto tiempo, surgen ideas para revitalizar este medio; toda la infraestructura que deja, marca un antes y un después en el desarrollo económico como urbano de la ciudad de Osorno y de paso, toda la Región de los Lagos.
Durante gran parte del Siglo XIX, no ha habido un mayor símbolo del progreso, que el ferrocarril y su llegada al sur de Chile, significo un cambio de paradigma económico, la Región de los Lagos y sobretodo Osorno nunca volvieron a ser lo mismo.
Su llegada adquirió gran importancia hacia finales del Siglo XIX y comienzos del XX, sobretodo para el desarrollo de las ciudades de Valdivia, Osorno y Puerto Montt. La llegada a Osorno (1903) derivo al desarrollo de una potente industria agrícola y ganadera, el nuevo medio de transporte requirió una infraestructura especial en la ciudad, en la entrada norte requirió la construcción de un puente ferroviario curvo, él único en su tipo en todo el país, el tendido ferroviario a través de la calle Portales, que propició un acceso directo a las bodegas de las sociedades molineras, la necesidad de contar con estaciones ferroviarias modernas tanto para la carga de bienes, como de pasajeros.
A medida que el ferrocarril desplace al vapor, como principal medio de transporte, se construyen nuevas poblaciones como la Felizardo Asenjo en Ovejería, para otorgar casas y servicios para los trabajadores de la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE por sus siglas); aunque con el paso del siglo, se moderniza el tendido ferroviario, desplazándose a su actual posición, por los constantes accidentes que ocurren en Portales, como el surgimiento del Automóvil y Buses. No solo cambia Osorno, surgen nuevas ciudades entorno a las vías, como Purranque que surge en 1911, con el paso del tren.
A pesar de que el Ferrocarril desapareció como medio de transporte en el Sur de Chile y cada cierto tiempo, surgen ideas para revitalizar este medio; toda la infraestructura que deja, marca un antes y un después en el desarrollo económico como urbano de la ciudad de Osorno y de paso, toda la Región de los Lagos.
Estación FFEE
Antigua
La estación ferroviaria antigua, que hoy alberga la Pinacoteca Municipal frente a la Plaza Fermín Vivaceta, fue construido en 1917. La construcción del nuevo edificio, estuvo a cargo de la misma empresa francesa contratada para hacer puentes y trazados ferroviarios por todo el país, la misma que construyó la Estación Central en Santiago de Chile.
De una marcada horizontalidad, tiene un alero de 70 mts lineales que le otorga continuidad a su fachada, poniendo en manifiesto su carácter público. Proyectado por el arquitecto Emilio Jecquier (autor del Museo Nacional de Bellas Artes), es una de las pocas manifestaciones de un neoclásico francés en la ciudad. Remata la calle Rodríguez y enfrenta y configura la plaza Fermín Vivaceta.
Puente Ferroviario
Río Damas
Maestranza
FFEE | Ovejería
Casas Felizardo Asenjo | Ovejería
Bodegas FFEE |
Ovejería
Ex Trazado
Ferroviario Calle Portales
En 1985 se construye el primer ferrocarril entre Pichirropulli y Osorno, cuya línea férrea cruza la ciudad por calle Portales, a sólo dos cuadras de la Plaza de Armas. El trazado comprendía desde Francke cruzando por el río Damas a través del puente curvo y llegando hasta la esquina de Rodríguez con Portales.
En 1961-62 por seguridad se actualiza el trazado de la línea férrea, el cual contempla un nuevo puente ferroviario. En la actualidad aún quedan vestigios del puente curvo los cuales pueden verse desde la esquina de Baquedano con Portales.
Junto con el traslado del trazado, se construye una nueva estación moderna para albergar un mayor flujo de personas, ésta estación se inaugura en 1964 y es hoy el Museo Interactivo de Osorno.
Con el paso de los años, la ciudad debió ampliar sus límites. Una zona de crecimiento fue hacia el sur, junto a la línea férrea, con las instalaciones industriales y de bodegaje relacionadas con el transporte ferroviario. Hoy zona de Ovejería.
La nueva orientación económica, fundada principalmente en base a la explotación de trigo y ganado vacuno, se localizó junto al ferrocarril. Ferias ganaderas, lecherías y molinos se trasladaron hacia el sur-poniente donde fue trazada la nueva línea férrea.
Cimiento Antiguo
Puente FFEE
La entrada del ferrocarril hasta 1965, se hacia desde Francke, donde se levantaba un Puente de piedra, donde luego el convoy se empinaba sobre el puente ferroviario curvo, el único de su naturaleza en Chile, el porque era curvo, se debía a la necesidad de que el tren bajara su velocidad, al momento de ingresar por medio de Calle Portales.
Sin embargo, la necesidad de modificar el trazado para evitar, los accidentes cada vez mas frecuente, en la Calle Portales por la masificación del automóvil; el terremoto de 1960, llevo a empujar la idea de construir una nueva estación para la ciudad, modificando el trazado original, que pasaría por Francke, pero por un puente metálico.
Haciendo que el único puente curvo ferroviario de Chile, diera concluida su trabajo siendo finalmente desmantelado durante los años 70.
